Todo empezó con el célebre: "a los paletos todo les parece muy bonito"... que me recordó la frase de aquel odioso, en masculino, intento de profesora de gallego que decía: "qué atrevida é a ignorancia". ¡Qué necesidad de espejos! Después, al leer un artículo en inglés, me vino a la mente el falso amigo "evidence" que no significa "evidencia", sino "pruebas", lo cual es muy diferente: por ejemplo sería ridiculo estudiar las "evidencias" porque, como la propia palabra indica es algo que se ve a simple vista, que no necesita de un esfuerzo. Relacione este anglicismo con el conocido "ejecutivo agresivo". Cuando una persona anglofona habla de "aggressive" está apelando a su dinamismo, a que es muy incidido, muy enérgico. En castellano no tenemos esta acepción y, por lo tanto, al tildar a un vendedor de "agresivo" estamos diciendo de él que pretende ponernos la mano encima. Otras meteduras de pata: esta vez ya tomadas de la fuente periodística, tanto en su afluente televisivo, como en el escrito son:
- "La ley contempla"...: debería tenerse más cuidado con el verbo contemplar. Significa observar, mirar con mucha atención. Así pues la ley no contempla nada: la ley dispone.
- "Clima" en lugar de "Tiempo". De esta me di cuenta viendo la TVG: suele culparse al clima de cosas: "el clima no ayuda", "la meteorología es adversa", o incluso, y esta combinación ya roza el éxtasis, la "climatología nos llevará a la quiebra". Para empezar no cabe duda de que esto es un intento (en este caso) absurdo de intentar diferenciarse del habla ordinaria de los oyentes o lectores. No creo que el periodista de turno al entrar en el ascensor afirme: "qué mal está la climatología hoy". Pero le pones una bata blanca a alguien o lo situas frente a una cámara y automáticamente deja de ser normal y habla raro. El clima es el tiempo en un conjunto de tiempo más o menos amplio. La meteorología es una "ciencia", μετέωρον "alto en el cielo" y λόγος "conocimiento", de las que llaman "interdisciplinarias". La climatología, en cambio, es la rama de la Geografía que se encarga del estudio, ahora sí, del clima. "El tiempo no ayudó"; esa es la frase.
- Vanalización de las perifrasis, pérdida de su significado: "a pie de monte": "justo al pie del monte" es su sentido. "A pie de página" recoge perfectamente su sentido. El problema viene cuando se aplica a elementos no demasiado verticales: "a pie de campo", o "a pie de urna". Aquí la perífrasis ha perdido parte de su significado pedestre.