con tanta delicadeza
que creí volverme a romper.
Me indicas algún rincón oscuro,
alguna de tus calles epidérmicas.
Trazas armoniosas esquinas,
sin esquivar esa sensación
que hace que ya no me escribas
y que sólo a duras penas
te deja mantener
mis manos
alejadas
de ti.
2 comentarios:
fue un ayer tan presente que dolía
... ¿es una sugerencia?
podría incluirlo perfectamente en el poema...
Una yema esbozaba un ayer,
tan presente que dolía,
con tanta melancolía
que creí que me iba a romper ...
Improvisación.
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