lunes, 24 de agosto de 2009

El escriba sentado


Recuerdo haber visto esta obra; la foto lo prueba, creo que en el Louvre. Es muy muy pequeña. Google confirma mis sospechas. Es un retrato de un noble llamado Kai y se encontró en su tumba, en la zona de Sakkarah. Fue tallada durante el imperio Antiguo en el milenio II a.C. La escultura es de madera y representa a un importante funcionario egipcio. Es un retrato muy realista y la fisonomía aparece claramente individualizada. Los ojos están hechos con cristal de roca y caliza en una cápsula de cobre, técnica con la que se consigue una mirada muy real y viva. El personaje aparece sentado, con expresión atenta, y preparado para escribir. Es una postura tranquila y carente de tensión muscular, de un modelado suave que alcanza un realismo sobrio. Tiene el hieratismo característico de la mayor parte de los retratos egipcios y, como es habitual, mantiene también la frontalidad. Como la mayoría de las esculturas egipcias de bulto redondo, éste es un retrato funerario. El rito mortuorio egipcio exigía realizar un retrato fiel del difunto y colocarlo en la tumba para que el ka, el alma, del muerto lo reconociera y se alojara en él. Es, por lo tanto, una obra religiosa, que busca la eternidad, pero que transmite una sensación de realidad y (¿por qué no?) cercanía. Eos, como siempre, deslumbrante, al fondo.

1 comentario:

Eos dijo...

Mi intento de foto con el escriba...
y mi anonimato salvado por el flash xD