miércoles, 5 de noviembre de 2008

Miscelánea

Estoy asombrosamente abrumado por toda la información que me ha llegado esta semana, a lo cual quizás ayude la severa gripe que padezco. El proceso de selección de aquello que me importa, es decir, de las cosas que pretendo retener, tendrá que ser más exhaustivo esta semana. Esta entrada, en el fondo es para eso. En clases vemos cosas como que la palabra gallega "casamento" se refiere a la acción de que los recien casados iban a constituír una casa entre ambos. Vimos también, a propósito de la acción de casarse que acabo de mencionar, su forma latina: "uxorem ducere" (conducir-mujer) que tanto critican, y sin demasiado sentido, las feministas de hoy en día por la pasividad (en la construcción linguística) de la mujer. Recordamos también el uso de "Alter" y de "Alius": el primero es "uno de dos" y el segundo "uno de una serie abierta". Hubo asimismo una explicación etimológica del verbo preferir (prae"llevar por delante" fero "llevar"). Otro día explicamos la existencia de tres substantivos para referirnos a una población: civitas "conjunto de ciudadanos de una población", urbs-urbis, "espacio delimitado y organizado" y oppidum "ciudad amurallada". Pero también habíamos visto "pagus": aldea. Y ahora recuerdo una cosa que me llamó la atención considerablemente: ¿sabíais que los primeros cristianos llamaban "paganus" "aldeanos" a la gente que todavía seguía la religión pagana en la profunda edad media? Y yo me pregunto: ¿Es el movimiento cristiano un movimiento urbano por este hecho? Voy a aburriros un poco más, pues, acabo de recordar la explicación de la palabra "educación": viene de "duce", guiar al alumno: trasladarlo de una sitación a otra. También recuerdo la explicación del verbo querer (muy bonita por cierto). Era algo muy platónico, muy propio de "El banquete": tanto como que querer es buscar: "querer"-quaerere= buscar y "buscar algo" es "querer". Para terminar, recurro a algo que está hoy, gracias a la victoria de Obama, en boca de todos: las votaciones democráticas. En Roma no disponían evidentemente de lectores digitales para las votaciones, ya fuesen elecciones o una votación en el senado. Para estas útimas, las votaciones senatoriales, los romanos eran muy humanos, si me lo permitís. Ellos decían "ire in verba alicuius" para votar en la curia: se acercaban a quien querían votar una vez que este había hecho su discurso. Eran muy eficaces. Hoy el profesor de latín me preguntó mientras encendía el ordenador y el proyector del aula: "¿qué pasa Óscar?" (lo cual se está convirtiendo en tradición que comezó el primer día de clase). Yo le contesté, por hablar de algo: "que ganó Obama". Nos estuvo explicando durante media hora que la elección de un presidente como Obama, por su color de piel, era un síntoma de debilidad del imperio Estadounidense, como ya había ocurrido en el Imperio Romano durane los siglos III y IV d.C. cuando se buscaban emperadores que representasen a minorías o a partes del imperio, pero lejanas a Roma (como Trajano, creo recordar). Pero esto sólo podemos aceptarlo si pensamos, como Polibio, que la Historia es cíclica. Tengo que pensar algo estos días en algo interesante para responder al ¿qué pasou Óscar? de este próximo lunes. ¿Ideas?

2 comentarios:

Osore dijo...

Ale, con lo poco lúcida que estoy no se me ocurre ninguna idea, pero seguro que la sociedad se encargará de sacar alguna polémica que no sea de los programas de cotilleo, alguna interesante.
Dios, Bush tiene sus días contados en la Casablanca, todavía no me lo creo. Mientras escribo Casablanca una neblina cinematográfica acude a mi mente, no puedo evitarlo.

Que la Fuerza te acompañe.

Ó dijo...

Venga... piensa que ya solo me quedan dos días...