jueves, 8 de enero de 2009

Ser mejor persona.

El día de Reyes, tras la cena familiar me fui con mis amigos. Dos estudian cosas parecidas: ingenierías. Uno una "técnica" y otra una "superior". La superior se mofaba del técnico por su "miniatura de carrera" y él le contestaba con una nómina en mano (puesto que la superior todavía está en tercero). La superior se enfadaba más y más caía, suponemos que en broma, en descalificaciones. Yo les digo a ambos.


"Ay, he estudiado ya Filosofía, Jurisprudencia, Medicina y también, por desgracia, Teología, todo ello

en profundidad extrema y con enconado esfuerzo. Y aquí me veo, pobre loco, sin saber más que al

principio. Tengo los títulos de Licenciado y de Doctor y hará diez años que arrastro mis discípulos de

arriba abajo, en dirección recta o curva, y veo que no sabemos nada. Esto consume mi corazón"


Aunque lo dice Goethe en su fausto, y no yo...

¿Estudió también Goethe una carrera?

Yo sólo sé que no se es mejor persona por ello.

2 comentarios:

Raquel dijo...

El problema estriba en esas absurdas jerarquías establecidas por la sociedad. Se asume que ciertos estudios más demandados son "más importantes" puesto que se confunde su relevancia cuantitativa con la cualitativa. De hecho, la mayoría de la gente entiende que eres más inteligente por el mero hecho de estudiar una licenciatura que un ciclo aunque solo sea porque tienes por delante más años de aprendizaje. Falso pero común error.

Anónimo dijo...

Lo de ser más inteligente suena a tontería claro está: pero si es verdad que les falta mucho, pero mucho contenido teórica (para una formación "agradable" a las carreras "de tres años". Demasiado pragmaticamente orientadas (dicen)